Hace unos días me encontré en un bar, rodeada de unas cuantas mujeres, a las que no había visto nunca y no creo que vaya a volver a ver, tomando una cocacola. Ellas venían de una especie de reunión de trabajo, moderneces de esas que organizan los jefes de, vamos a conocernos. Y claro, la conversación era de trabajo y estaban quejandose de un compañero nuevo que creía tener solo derechos.
Estuve a punto de contar una batallita sobre como me las gasto con los compañeros de trabajo pero no me atreví a contarlo, no terminaba de estar a gusto, en realidad no se por que, el caso es que no abrí la boca.
Lo voy a contar ahora que no ve nadie.
Por volumen de trabajo el jefe contrató una chica para ayudarme, evidentemente no era ni mas ni menos que yo, sólo era nueva. LLegó a las 8 de la mañana, a las 9 fuimos a comer algo y le dije. ¿A ver que llevas? y me comí su bocata. Entendió perfectamente lo que quise decir, "Como no te portes bien lo proximo que me voy a comer vas a ser tú".
Creo que voy a empezar una serie con la etiqueta "cosas que no debería haber hecho o así me va".
Pobre chica. Si ya me lo decía mi madre, no tienes cálculo ni medida.
Pobre chica. Si ya me lo decía mi madre, no tienes cálculo ni medida.
4 comentarios:
Joder! Eso no se hace. Debería darte vergüenza. Es un abuso de poder sobre "la nueva". Vale más que lo arregles o "la nueva" ojalá que se vengue de ti, pero bien vengada.
¡ Qué mala eres¡ Aprendió de la primera que no hay que fiarse de ti... y menos cuando tienes hambre.. gracias por la visita.. beso
Jajjajaja No, no deberías haberlo hecho pero me estoy imaginando la cara de la pobre chica y me parto jajajaja (yo tampoco debería reirme, lo sé jajaja)
Pero tengo una duda... ¿Volvió a irse a desayunar contigo? jajajaj
para el valiente anónimo, ves, por eso me callé con las pijas de harvard.
ico, mala pero mala, mala. :) pero no hijaputa. gracias.
izel, si, si demostró ser una tía valiente y volvió a desayunar conmigo.
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