viernes, 19 de noviembre de 2010

wyrocbdkdcoien

Hemos pasado unos días fuera y como me toca conducir y lo tengo que hacer de día intento que salgamos prontito, de manera que me levanto y empiezo a echar cosas al coche, mi mujer medio dormida sólo atina a tomarse un café y una ducha. Hala, al coche. No llevamos ni un kilómetro cuando empieza el repaso, a esta tortura estoy sometida desde que una vez preparé la maleta y fui a buscarla a la salida del trabajo para hacer un viajecito sorpresa sin tener en cuenta que es una pija y yo eché “ropa de monte”. Bueno, la tortura, ¿has echado esto? Siiii y esto otro? También, he echado todo lo que llevamos. Me mira y no lo dice pero sé que no me cree, así que paro y le digo, repasa. Vamos si repasó, abrió hasta la última bolsa donde yo había metido la mano, qué voy a hacer, no se fía de mi.

No sé que tiene la ap7 pero es coger el ticket y sentir la necesidad de parar a comprar donuts.

Siete día en Francia y de vuelta a la ap7 y a los donuts, ting tong los móviles vuelven a España y mi cerebro vuelve a procesar en castellano pero el la pakirrota no, y nada más cruzar la frontera me dice wyrocbdkdcoien. qué? Wyrocbdkdcoien. nena, no te entiendo, esa palabra qué quiere decir. Anda, intenta decirlo en castellano. Y es que la semanita ha sido una locura de idiomas, entre que Francia está llena de franceses empeñados en hablar francés, que a julie le ha dado por estudiar japonés, que Michelle habla patué, que la nueva churri de francois es noruega y que alguien le dijo que podría hablar inglés con nosotras, no hemos tenido una conversación decente en toda la semana.

La puta barrera del idioma es una mierda, a ver, que nos hemos entendido bien con todos pero hay una cosa que me ha dado rabia. La churri parece ser una tía muy interesante pero que me voy a perder por paleta, me pareció entender que es investigadora y se dedica a políticas de igualdad. Lo único que le entendí es que su hija nos mandaba besos y claro, qué piensas, que su hija entiende, y sigue diciendo que está haciendo la tesis sobre el feminismo en Francia y en noruega en los sesenta y setenta, eso, que su hija también tiene un rato. Me va a tocar estudiar noruego, jajajaja ni de coña.


 
Vaya, me he saltado la estancia, intentaré sacar algo pero aviso que lo que quiero contar lo llevo un poco travesado.

2 comentarios:

Juli Gan dijo...

Claro ejemplo de la globalización. Hala, mil idiomas en 100 m2. Jaaajajaja. Habrá que aprender idiomas, entonces.

Antonia dijo...

juli gan, que aprenda idiomas quien pueda o quiera, yo no estoy capacitada, eso y que tampoco tengo nada que decir :)