¿Comemos o follamos?

Me dice la pakirrota con un tono un tanto tristón “qué cerca estoy de los sesenta” y noto como sale de mi boca, bueno, también lo oigo, “¿nena, cuándo te me has hecho vieja? Ufff, no sé si es un poco tarde pero tengo que aprender a que lo que salga por mi boca primero se de una vuelta por el cerebro, esto va mal, si es que últimamente me han dicho varias veces que el punto sin filtro me queda gracioso y me he relajado, si tenía algún filtro lo he perdido. 

Vamos a ver y vamos a ver, que esto no es así, ¿Qué hay detrás de una sin filtro? La respuesta es bien fácil, una sin seso, tengo que admitir que el día que repartieron los cerebros yo no estaba en la fila. Y ahora tengo un problemilla y la única solución que se me ocurre es coserme la boca porque luego voy a querer un ratito de sexo y me da que ella no va a querer, es más, si le sigo soltando estas lindezas me va a poner de patitas en la calle.

Cuanto más lo pienso más oscuro lo veo. Evaluando mis posibilidades, pff mi atractivo físico es inexistente, con lo cual, por ahí no voy a conseguir convencerla y mi atractivo intelectual está en niveles subterráneos, si alguna vez lo tuve se me debió caer a un pozo y se ahogó, chungo, chungo.

Ah, ya sé lo que voy a regalar, jijiji, total, de perdidas al río.

Ah, la respuesta a la pregunta del título del post es "primero lo que tú quieras y después comemos."